El Grupo Scout San Cayetano celebró su 45° aniversario

“Nunca fracasamos cuando tratamos de cumplir con nuestro deber, siempre fallamos cuando no hacemos todo lo posible.” De esta manera dio inicio el acto protocolar de celebración de los 45 años del Grupo Scout San Cayetano en las instalaciones del Club Español.

Tras la bienvenida a las autoridades e instituciones presentes, familiares, ex dirigentes Scouts, antiguos scouts del grupo, hermanos scouts de otros grupos, se dio ingreso a las banderas de ceremonias:

Abanderado de la Bandera Nacional: Viggo Keergaard

Primera Escolta: Francisca Reda

Segunda Escolta: Alma Moreira

Abanderado de la Bandera scout: Matías Keergaard

Primera escolta: Oriana Carrasco

Segunda escolta: Rosario Díaz

El actual Jefe del Grupo, Alberto Lagerwy se dirigió a los presentes manifestando:

“Quiero darles la bienvenida como Jefe del Grupo Scout San Cayetano, al cumplir 45 años del inicio de una historia que tuvo sus antecedentes décadas atrás. Esta agrupación, como la conocemos hoy, resurgió en 1979 para seguir los pasos de otros scouts que abrieron la huella, para sembrar los valores y continuar con mucho esfuerzo hasta llegar a este día tan significativo para la comunidad sancayetanense.

Me han contado de los momentos de lucha, donde un puñado de valientes, motivados por la pasión que solo un scout siente, puso todo su empeño para que la llama no se extinguiera, los fogones prosperen y muchos pequeños vivan la experiencia de ser formados en la vida al aire libre, con valores que le permitieron afrontar la vida con la mirada de las buenas acciones. Basta ver las caras de quienes portaron el pañuelo que, al enterarse de este aniversario se les dibujó una sonrisa, un grato recuerdo de un campamento, de una excursión, quizás de algún reto, pero siempre sabiendo que era por querer sacar lo mejor de las personas.

Seguro que alguna vez, siendo scout, tuviste el rostro cansado portando una mochila, embarrado, con los pies fríos tratando de darte calor con una taza de mate cocido. O comiste un guiso un poco quemado, en el piso junto a otros pibes y dirigentes, que lo disfrutaron con una sonrisa sabiendo que estabas generando una anécdota para repetir mil veces.

Les aseguro que esa misma adrenalina sienten los niños y jóvenes que están en esta formación, que han participado de la aventura de dormir en carpa, jugar con alegría junto a los educadores, formar sus grupos de pertenencia, bailar o actuar junto al fuego perdiendo el miedo al ridículo, ponerse serios en el izado de nuestras banderas, participando de debates sobre los temas que les preocupan.

Podrá haber cambiado o haberse invertido el color de nuestro pañuelo, pero la esencia de ustedes, los “de antes” y los que integran el grupo en la actualidad, sique intacta, honrando a quienes partieron y asegurando un futuro lleno de historias por compartir juntos, en hermandad.

Estoy convencido, valorando la Ley Scout, que el escultismo sirve para preparar niños y jóvenes para un mundo mejor. Niños y jóvenes que aprenden valores, principios, basándonos en una ley y una promesa, aprendiendo a respetar, a trabajar en equipo, a opinar, a sentirse parte importante dentro del grupo, a desarrollar sus habilidades, a encontrarlas, descubrirlas, animándolos siempre a superar los obstáculos, teniendo Fe en el Gran Jefe, amando y respetando la Patria, la familia. Siendo generoso, cortés y solidario, a ser amigo y hermano de todos, a ser optimista aún en las dificultades, a ser económico y respetuoso del bien ajeno, en fin, a estar “Siempre listo”, “Siempre mejor”, para servir sin esperar recompensa o alabanza, a tener los ojos y las orejas bien paradas, aprender que la vida es un Gran Juego, que tiene normas, que tiene desarrollo y una enseñanza, la de superar cualquier obstáculo apoyándose y apoyando a sus hermanos scouts, a sus familias, a sus amigos, deseo que todos entiendan y que lo disfruten.

Siento mucha emoción de poder ser Jefe de este maravilloso grupo, en esta hermosa ciudad, donde todos, a la hora de trabajar y de colaborar, son materia dispuesta.

Deseo que Dios me dé la dicha de permanecer mucho tiempo a la par del grupo, amo el escultismo. Amo el Grupo Scout San Cayetano y soy feliz junto a todos ustedes. ¡Gracias! ¡Siempre listo!

Luego llegó en turno de la palabras a cargo de la Directora del Distrito 4  “Aitué” Sandra La Battaglia, que destacó la importancia de la fecha y los valores de la educación scout, agradeciéndola invitación a ser parte de los festejos y entregando de parte de las autoridades nacionales deun parche conmemorativo para utilizarse en la bandera de ceremonias de la institución.

El Secretario General del Municipio dejó el saludo del Intendente Miguel Gargaglione, quien por cuestiones de agenda no pudo asistir, agradeciendo luego “la inmensa labor que llevan adelante”. “Sabemos el rol social que cumplen en la comunidad; están atentos ante cada una de las problemáticas que surgen a diario, y contribuyen en la formación de nuestros niños, inculcando valores fundamentales”, concluyó Juan Altamira.

Alguien que puso el pecho cuando las cosas se pusieron difíciles, que nunca bajó los brazos y la remó solo cuando fue necesario para que el grupo continuara. Hoy no está físicamente con nosotros, pero su espíritu nos acompaña y su sabiduría nos guía, por eso la Comunidad Rover “Jefe Botoque”, hizo entrega de un presente a su familia. Recibió el reconocimiento, una réplica de un cayado, símbolo de la Rama Rover, Gabriela Cuesta y Guadalupe Saló, hija y nieta del ex Jefe Scout Sr. Lucas Cuesta por sus muchísimos años de aportes en todos los sentidos.

Tras la lectura de un fragmento de carta de Baden Powell a los dirigentes scouts, se dio por finalizado el acto.

Por la noche, se desarrolló una tallarinada compartida con antiguos scouts, actuales miembros del grupo, familias vinculadas a la historia del grupo, en la que se mostraron algunas actividades habituales de los niños, niñas y jóvenes, se presentó al equipo de educadores y el de cocina, y se compartieron tortas de cumpleaños.